Hasta hoy nadie sabe muy bien donde está la cabeza de Oliver Cromwell.
Algunos creen que sigue enterrada en Cambridge en la universidad que estudió.
La han buscado sin poder encontrarla.
Dicen que la tiene algún coleccionista de arte en un refrigerador.
Dicen que está enterrada en la abadía de Westminster, a donde tiraron su cuerpo.
Es el mayor misterio de la isla británica.
Oliver no murió decapitado,
pero su cabeza fue exhibida en lo alto de un poste clavado a la entrada del palacio.
Su cuerpo fue exhumado y lo colgaron de unas cadenas.
Le cortaron la cabeza y le atravesaron el cerebro con una pica.
Fue orden del rey Carlos II, quien luego de vericuetos volvió al poder.
Y como mensaje realista, tiró el cuerpo de Cromwell en un pozo.
Y expuso su cabeza durante veinticuatro años para disuadir a sus enemigos.
La lluvia quebró el palo y la cabeza se fue rodando como un balón de fútbol. Sigue leyendo →