Escena de la película
EL CINE DE NARRACIÓN MIXTA
Análisis semiótico de Oldboy, película de Park Chan-wook
Ríe y el mundo reirá contigo,
Llora y llorarás solo
Un grano de arena o una roca
Dentro del agua caen igual
(Premisas de la película Oldboy)
Por José Ricardo Báez G.
El mundo es imagen, hay que iniciar con esta premisa. Todo lo que percibimos por medio de los sentidos es una imagen, es decir una representación de lo real. Esto ha servido para iniciar discusiones que cuestionan la realidad desde la función semiótica. Esta función es la unión del Plano de la Expresión y el del Contenido, mediados por un código, lo que permite la comunicación. Precisamente la semiótica ha sido la que ha estructurado las reglas sintácticas y semánticas de lo que llamamos real. Realidad es lo que cabe dentro del lenguaje, lo que está por fuera es imperceptible, por tanto, para nosotros, es irreal.
En diferentes campos se ha discutido el problema de la imagen. Platón, en la antigua Grecia expulsó a los pintores por declararlos imitadores de la realidad, y no pensadores. Sin embargo él no se dio cuenta que inclusive las palabras que usaba para expulsarlos era una copia de la realidad. Toda imagen tiene un referente, así es como nace el lenguaje: Yo puedo decir “Vaca” y posiblemente me entiendan porque sabemos qué es una vaca y no es necesario traerla para mostrar el objeto. La V, la A, la C y la A son solo fonemas de un signo convencionalmente aceptado. Con las palabras nos robamos la realidad, la nombramos, la imagen es siempre re-presentación (volver a presentar, traer al presente) de un objeto.
Pero ¿Y si la imagen vale por sí misma? Precisamente esa fue la idea de todas las vanguardias de la primera mitad del siglo XX: El surrealismo, el cubismo, el futurismo. Ya no eran representaciones del mundo de los sentidos, sino que la imagen se sustentaba por sí misma. El jardín de las delicias de Hieronymus Bosch representa un mundo diferente al que concebimos en la realidad por los sentidos. Qué son las mujeres desnudas de Picasso dibujadas geométricamente como un garabato. Pues es eso, un Picasso. Dalí juega con lo mismo: Elefantes de piernas largas y frágiles, tigres que escupen peces o relojes derretidos. No existía punto de referencia, y la imagen se vuelve referente por sí sola. Sigue leyendo →